Este jueves, los escolares y adolescentes de la “unidad educativa” de los Ballets de Montecarlo rendirán homenaje a Claude Nougaro.

Ya verás, ya verás, ya no seré idiota. Aprenderé la lección con tus dedos, ya verás, ya verás...

Aprendieron la lección. Casi al alcance de la mano, tras el inicio de los ensayos finales este martes por la mañana, la Salle Garnier se ha convertido en el patio de recreo de un centenar de niños y adolescentes. No en el recreo, sino trabajando, para una creación llamada Tu verras , que rinde homenaje al poeta tolosano de la canción francesa, Claude Nougaro.

Sus melodías son el hilo conductor del espectáculo, que se presentará este jueves a las 20:00 h en la Salle Garnier. En el escenario, una compañía única representa el espectáculo: Chore-Voix, el proyecto de educación artística y cultural de los Ballets de Montecarlo.

Reúne a dos clases de CM2 de la FANB y Révoires, y a unos cincuenta adolescentes que, durante sus actividades extraescolares, participan en estos talleres donde cantan, bailan y actúan. Pero, sobre todo, se miden a sí mismos.

Trabajo sobre el cuerpo

"El núcleo del proyecto no es la danza, sino el trabajo corporal, los fundamentos del movimiento, el apoyo, la verticalidad. Ofrecemos un trabajo muy específico en relación con nuestros conocimientos de danza clásica para que los alumnos puedan expresarse tanto a través del movimiento coreográfico como del canto coral y el teatro", explica Dominique Dreyfus, quien coordina al centenar de artistas en ciernes que comenzaron su ensayo general este martes.

La profesora de danza, inspirada por Jean-Christophe Maillot , comenzó a pensar en esta unidad didáctica de la compañía Ballets de Montecarlo hace quince años.

Tras varias pruebas y errores, en 2015 el proyecto se convirtió en Chore-Voix, formado por escolares del Principado y adolescentes que vienen en su tiempo libre.

"No hacemos selecciones", continúa el gerente. "El objetivo es atraer a niños que necesitan este espacio para ganar confianza y progresar a su propio ritmo. Es educativo, y cuando adoptamos este enfoque de no presionar, de respetar el ritmo de cada persona, observamos que logramos buenos resultados".

"Observamos su metamorfosis"

Los salones dorados de la Salle Garnier, su inmenso escenario de catedral, el público esperado el jueves por la noche e incluso la viuda de Claude Nougaro en la sala... el desafío sigue siendo considerable para el grupo de artistas aficionados.

"La base de nuestro trabajo es sentirse bien con el propio cuerpo", advierte Dominique Dreyfus. "El proyecto dura un año, y esta regularidad da resultados. Contamos con excelentes herramientas de trabajo; tenemos que ganárnoslas. Pero en todos los niños con los que trabajamos, observamos su transformación a lo largo del proceso".

En las filas, sin embargo, la tropa está compuesta por más chicas. «El fútbol es una competición para nosotras», susurran al borde del escenario, donde los chicos son pocos...

Independientemente del género, la música y la letra de Nougaro marcan el ritmo de esta actuación cantada y bailada. Fue el director del coro invitado, Didier Grojsman, quien tuvo la idea de incorporar la discografía de Nougaro a Chore-Voix este año para crear una unidad musical.

"Hemos redescubierto la poesía de sus textos y decidimos rendirle homenaje", explica Dominique Dreyfus, recordando que "la educación artística y cultural es importante".

Tanto por el logro de jóvenes artistas que dan lo mejor de sí mismos como por la inmersión en las nunca suficientemente celebradas melodías de Nougaro, Tu verras merece la pena.